martes, 6 de marzo de 2012

Aventuras con mi lector de libros electrónico

He obtenido muchos libros gratuitos en formatos PDF.  Este formato está muy bien para imprimir, porque asegura una impresión fidedigna.  Pero nada bien para leer en pantalla, porque no se puede cambiar el tamaño de letra y no refluye, ni se adapta a diferentes tamaños de pantalla.  En cambio la mayoría de lectores de libros electrónicos aceptan el formato EPUB, que en el fondo no es más que HTML comprimido.  Este último formato es mucho más amigable.

La solución: convertir el formato.  El problema es que un PDF no está estructurado en párrafos.  He probado Calibre, una herramienta gratuita y bastante completa.  Lo malo es que convertir PDF no es su punto fuerte, y da resultados desastrosos con algunos de ellos.

He encontrado esta otra herramienta, que a pesar de no ser perfecta, da resultados bastante aceptables y mucho mejores que con Calibre.  Se trata de PDF to ePub converter.  La he usado en Linux - concretamente Ubuntu -  sin problemas, a pesar de ser una herramienta destinada para Windows.  Todo ello gracias a Wine, un emulador de Windows bajo Linux.  Lo único que es una herramienta de pago, que se amortiza si se tienen muchos libros que convertir.  He conseguido sin problemas quitar el pie y la cabecera de página.  Hace falta tantear un poco, para sacar libros optimizados.  Se le ha de especificar que textos forman parte de gráficos o de tablas.  Merece la pena realizar este esfuerzo para mejores resultados.  Permite hacer vistas previas del resultado tal como quedaría en nuestro lector de libros, aunque a mi sólo me mostraba el de la 1ª página.  Será a lo mejor debido a que trabajaba con Wine.

También recomiendo Sigil, para retocar el ePub producido.  Con Google Translate, he sido capaz de traducir su contenido de forma automática, sin perder información de formato, e incluso realizar alguna corrección.  Si bien no es perfecta la traducción, mejor eso que realizarlo a mano, y da un resultado bastante aceptable, con alguna pifia que otra.

Tanto Sigil como Calibre, están disponibles en varios sistemas operativos, incluidos Linux y Windows.